El Tibet Libre

Juro que he hecho un esfuerzo para detener mi pluma sobre este tema, lo he bajado en la lista de pendientes, hasta de la lluvia hablé, dándole esquivas al tema. Pero ya no más, no puedo detener la tinta digital cuando de limitaciones de Los Derechos Humanos se trata.

Foto: Salvador Martínez
(Del libro Laberintos - Madrid 1986)
Cortesía: http://www.margencero.com

Interés Chino
Desde pequeño en mi mente se ha creado la visión de que todos los que viven del lado más oriental del Planeta son profundamente más pacíficos, inteligentes y espiritualmente evolucionados.
Fue sólo hasta 1950 que empezamos a ver los occidentales, que más allá de los territorios ocupados por Alejandro Magno también había gente. Por eso es mínimo el conocimiento que tenemos de los chinos, japoneses, mongoles, vietnamitas, nepalíes, manchúes y tibetanos, entre otros pueblos orientales. Y ellos a su vez nos sienten ajenos, como si fuéramos casi marcianos.

Para resumir la historia del Tibet, antes de 1900 siempre fue una región independiente con una teocracia Budista, un sistema centenario que da el poder sobre toda la región a los regentes de la religión Budista del Tibet.
A partir de 1908 los Chinos empiezan a tener intereses sobre los recursos del Tibet, en varias oportunidades intentan apropiarse de esta región, invadiéndola, sembrando el caos, pero siempre estuvo la Unión Soviética o Inglaterra de parte del Tibet para frenar o por lo menos aguantar las ambiciones chinas.
En 1949 con la recién nacida República China, el poderoso y celestial Mao Tse Tung en su proyecto expansionista decide reclamar al Tibet como parte de “La Madre Tierra”. Ojo no se pierda no estoy hablando de Estados Unidos ni de la Alemania Hitleriana, estoy hablando de China hace 59 años.
En 1950 se apoderan por fin de Lhasa y en 1956 se crea una supuesta “República Autónoma del Tibet” y se empiezan a instalar oficinas comunistas, centros de adiestramiento, y la gente del Tibet, que si bien es calmada no se la aguanta y se arma con lo que podía en una Guerrilla contra los 80.000 soldados del Imperio Chino. No, no es 1800, es 1956.
Pues palos van y palos vienen, muertos, presos, y templos quemados y destruidos, en una especie de enfrentamiento de David y Goliat, pero es que David tuvo suerte, era 1 en contra, ¡aquí eran 80.000!, fácilmente el ejército de China aplasta a la guerrilla mal organizada y muy mal armada del Tibet. Es que ni siquiera era una Guerrilla, era un grito de “No me jodan”.
Con la derrota de los “traidores a la patria China”, los Chinos le clavan los dientes al Tibet, con una política de atraso y deterioro, que mantiene a la región sumisa.

Ocupación
Pues los chinos haciendo buenos negocios han comenzado a ofrecerles a los habitantes de sus saturadas ciudades que ocupen “su puesto” en el Tibet, la habiten y críen a sus hijos bajo principios comunistas. Este tipo de invasión ha desplazado a los Tibetanos a una zona limitada de su territorio, encontrándose hoy dos realidades, las de los muy pobres habitantes originales del Tibet y la de los ricos y poderosos chinos invasores.
No contentos con esto, China limita cualquier tipo de protesta, y mantiene en el exilio al líder de los Tibetamos, el Budista Dalay Lama, un puesto que cada día menos tibetanos están dispuestos a ocupar, por el sufrimiento que representa.
A esta torta se suma la política Tibetana de control de natalidad y esterilización de las mujeres budistas tibetanas, y la multiplicación bestial de los chinos que ocuparon territorio tibetano.

Resistencia
Son 50 años de resistencia brutal a la imposición, la represión, la fuerza contundente de los que son más y tienen más. Agudizado el tema desde la desaparición de la U.R.S.S. Qué servía como potencia mediadora de los conflictos orientales, como una especie de E.E.U.U.
Desde la “sensacional” Guerra Fría y la política Norteamericana de destrozar a la U.R.S.S. el resultado ha sido múltiples guerras en los territorios orientales, las Coreas enfrentadas, y los chinos jodiendo a quién le venga en ganas y no sea comunista.
Todo el poderío y la saña china ha sido detenida simplemente por los espíritus de un puñado de tibetanos, pero ¿cómo tanta resistencia?

El Budismo
Otra de las religiones que me genera total y completa admiración, los budistas y en especial los Tibetanos Mahayanes mantienen la idea de la transformación espiritual. Creen que el hombre debe cambiar su forma de pensar y vivir para alcanzar la evolución, pero lo más formidable es que creen que la evolución es colectiva. Por ende, ninguna de las presiones chinas ha doblegado su creencia, más bien la aviva.
Ningún tibetano será feliz y estará en paz hasta que los niños, jóvenes, y seres humanos sean libres espiritualmente, esta creencia choca contra el materialismo y pragmatismo comunista chino.
China con su política de “Laboratorio Mediático Comunista” ha atacado ideológicamente al Dalay, acusándolo de llevar a su pueblo a la ruina y de ser criminal, pero para decepción de los pobres chinos, su campaña no ha surtido efecto alguno.

Análisis
¿Será que el Mundo le agarró miedo a los chinos?, claro son más, son muchos, pero por eso ¿vamos a permitir sus atropellos? Estados Unidos vive perdiendo su tiempo metiéndose en conflictos sin sentido, qué decir de la guerra contra Irak sólo por intereses económicos, pero cuando de verdad tiene una causa para hacer presión no violenta, no les interesa…
Si pero es verdad, no sé en qué pensaba en la frase anterior, ¡el Tibet no tiene petróleo! Pero no sé, creo yo, digo, allí si se están violando los Derechos Humanos de una minoría. ¿Dónde está Naciones Unidas?
Encima se le permite a este Imperio opresor ser organizador de unas Olimpiadas, juegos que reúnen a los atletas de todo el mundo en un acto de hermandad y amistad deportiva, de reconocimiento de las capacidades físicas de otros países hermanos. ¿No es como un sin sentido?
Tengo la costumbre de que si me molesta la hipocresía del que se me sienta al lado me paro y me voy, el problema en este caso es que no tengo otro Mundo donde ir a vivir.
¿Cómo podemos hacernos ciegos ante semejante opresión y tiranía?, ¿tiene que pasar otra tragedia como la ocasionada por el fanatismo alemán para conseguir el apoyo del Mundo?, Si los gritos desesperados de los judíos se hubieran escuchado a tiempo, ¿cuántos no hubieran probado las cámaras de gas?. ¿Tiene que haber cámaras en el Tibet para actuar?
Siento que las Olimpiadas no se deben realizar en China, no por una cuestión de boicot, es por sentido común. Es demasiada diplomacia para mí.
Lo más irónico es que sale un grupo de periodistas que tienen años siguiendo el tema, y deciden boicotear el acto inaugural de este sin sentido, y son tildados de criminales o Hippies. Un grupillo de locos que desconocen la maldad del pueblo tibetano. Sí, claro, ¡qué malos son los monjes del Tibet! ¿No será que están cansados de recibir tantas coñazas chinas?

¿Qué podemos hacer?
Una de las estrategias que más ha ayudado a los tibetanos ha sido el grito de otras creencias y otros países de apoyo a la libertad de culto y forma de vida. Mientras muchos chillen pareciera que los chinos como que se la piensan 2 veces.
Hay que decirle un NO a las políticas expansionistas, opresoras y desmedidas del sistema político comunista de China y de cualquier otro. Por encima de cualquier interés está el respeto incondicional de los Derechos Humanos.
Por eso desde este blog nos unimos a la Libertad Política, Ideológica y Religiosa del Tibet.


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